Cada vez son más los emprendedores que optan por la franquicia como la mejor forma de tener su propio negocio.

Entrar en el mundo empresarial de la mano de una gran marca es siempre más seguro que hacerlo solo, pero convertirse en franquiciado no es una decisión que deba tomarse a la ligera, sino que requiere de un período de análisis. Antes de comenzar a buscar la franquicia más adecuada es recomendable hacer un autoanálisis de las capacidades, conocimientos, aptitudes y habilidades del emprendedor, ya que este examen pueden ayudarle a conocer mejor sus fortalezas y sus debilidades y a identificar el sector en el que podrá operar con más éxito. Evaluadas las competencias propias es momento de buscar un sector de actividad que resulte atractivo e identificar dentro de él las diferentes opciones de franquicia que existen. Con la lista de franquicias interesantes para el emprendedor ya elaboradas, es el momento de entrar en contacto con ellas y analizar con detenimiento sus propuestas. Descartadas aquellas que en principio no interesan al emprendedor y ya con una lista más reducida, es recomendable seguir buscando información sobre la franquicia por canales alternativos que permitan al emprendedor conocer que opina el público potencial de la franquicia sobre sus productos o servicios o cual es la opinión sobre la franquicia que tienen otros franquiciados. Elegida la franquicia, es hora de examinar con detenimiento el contrato de franquicia. Este contrato establece los derechos y obligaciones de ambas partes por lo que es esencial que el emprendedor se asegure de entender adecuadamente lo que dispone el contrato. Si lo estima necesario, puede acudir a un experto en la materia que le aconseje y resuelva sus dudas. Como vemos, montar una franquicia no es sencillo, pero si se actúa con paciencia y diligencia las posibilidades de alcanzar el éxito son mayores.