Lavanderías autoservicio La Wash para cuidar la ropa de cama

La ropa de cama es de las prendas más delicadas que hay en las casas, especialmente en el caso de personas alérgicas al polvo o los ácaros. Una buena higiene de la ropa de cama implica lavar las prendas a una temperatura elevada para acabar con ácaros. Un ciclo de lavado a 30º C o 40º C deja las sábanas y las fundas de almohadas y de colchón limpias, pero no es suficiente para eliminar los ácaros. Los ácaros comienzan a morir a temperaturas por encima de los 58º C, por lo que para acabar con ellos se necesita mínimo un lavado a 60º C. Un lavado a esas temperaturas puede ser costoso por la gran cantidad de electricidad necesaria para calentar el agua a la temperatura indicada, es por ello que en estos casos las lavanderías autoservicio se perfilan como una de las mejores soluciones para tener la ropa limpia e higienizada.

Los ácaros pueden acarrear graves problemas de salud para aquellas personas que son alérgicas. La mejor manera de garantizar que la cama es un lugar óptimo para el descanso es lavar las sábanas y las fundas del colchón y las almohadas a temperaturas de 60º C cada quince días.

Combinando estos ciclos de lavado en profundidad, que pueden hacerse fácilmente en las lavanderías autoservicio, con ciclos de lavado a una temperatura más baja, se consigue tener una ropa de cama siempre limpia y libre de ácaros. Además las lavanderías autoservicio cuentan con la posibilidad de secar la ropa haciendo uso de una secadora, lo que a la vez contribuye a un mayor higienizado de la ropa. Lavando la ropa de cama en lavanderías autoservicio se consigue ropa limpia e higienizada de una forma rápida y más económica que si se hace el lavado de las prendas en casa