Las lavanderías de autoservicio se han convertido en uno de los establecimientos de servicios más elegidos por el público joven. ¿Por qué ha ocurrido esto? En realidad por varias razones.
Son muchos los jóvenes que están fuera de su lugar de origen cursando sus estudios o empezando su carrera profesional lejos de su hogar.
Muchos de ellos se ven obligados a compartir piso para poder hacer frente a los gastos que implica vivir emancipado, y empieza a ser frecuente que las viviendas de alquiler destinadas al público más joven carezcan de lavadora.
Ante esta situación los jóvenes han encontrado en las lavanderías de autoservicio el mejor lugar para poder hacer la colada de forma práctica. Pueden acumular ropa sucia durante varios días e incluso durante un par de semanas y en una hora tendrán toda su colada limpia y seca.
Las lavanderías de autoservicio no son los viejos establecimientos que estamos acostumbrados a ver en televisión.
Son locales limpios y con las últimas novedades en tecnología para hacer la colada, por lo que las generaciones más jóvenes se sienten muy cómodas en estos lugares.
De hecho, muchos establecimientos cuentan con WiFi, haciendo que la espera resulte mucho más amena. La lavandería es, además, una buena forma de estar en contacto con la gente del barrio, conociendo tanto a los recién llegados como a los que llevan en él toda la vida.
Otra de las razones por las que los jóvenes están optando por hacer la colada en las lavanderías automáticas es que ahorran una gran cantidad de dinero. Al no poner la lavadora en casa ahorran en luz y en agua, pero también en detergente y suavizante.
Los jóvenes no tienen demasiado tiempo libre y el ahorro de tiempo es otro de los motivos por los que suelen escoger hacer la colada en los centros de lavado.