¿Tendemos a una sociedad dónde compartiremos más servicios?
Compartir servicios no resulta sorprendente para las nuevas generaciones y es hacia este nuevo modelo emprendedor donde se dirigen los cambios en el consumo.
Aunque el concepto de economía colaborativa tiene tantos defensores como detractores, y al mismo tiempo múltiples definiciones que intentan caracterizarla, se convierte en un hecho con los avances de los medios digitales.
La combinación de elementos de la economía comercial clásica con actividades basadas en compartir impulsadas por modelos de consumo alternativos, ya no es algo novedoso.
Servicios globalmente reconocidos y exitosos como el alquiler o intercambio temporal de viviendas, vehículos y hasta el uso de múltiples servicios para la empresa y el hogar.
Pilares de la transformación hacia una sociedad colaborativa
La colaboración en el consumo de servicios supone la emergencia de un modelo disruptivo, donde la colaboración es el pilar de la sostenibilidad para mejorar las oportunidades de emprendedores y consumidores.
Con esta transformación del modelo económico, el uso y desarrollo de las tecnologías digitales se transforma en un acelerador y conlleva cuatro características:
- Utilizar las tecnologías de la información y la comunicación para facilitar las transacciones entre pares, alguien que tiene un bien y pone su utilización a disposición otros alquilando sólo lo que dura el servicio.
- Confiar en la calificación de los usuarios, pues nadie sabe mejor cómo es un servicio que quienes ya lo han utilizado, estando abiertos a escuchar la demanda de mejoras o ajustes en el sistema propuesto.
- Flexibilidad para garantizar la disponibilidad de los servicios y la accesibilidad a la información.
- Transferencia de conocimientos y cooperación para la innovación y expansión de los servicios a través de nuevos emprendedores.
En esta sociedad tendiente a compartir más servicios, las lavanderías autoservicio constituyen un espacio central para la transformación hacia la cooperación, la eficiencia y la sostenibilidad.
Con un modelo de franquicias centrado en las capacidades del emprendedor y la confianza de los usuarios, La Wash ha avanzado desde una tienda de barrio a más de 500 lavanderías en España y Portugal.